Tras asesinar al viejo Tiberio, Calígula se convierte en omnipresente César de Roma. Su megalomanía hace de él un hombre odiado y temido.
Tras asesinar al viejo Tiberio, Calígula se convierte en omnipresente César de Roma. Su megalomanía hace de él un hombre odiado y temido.
1 comentarios:
Un gran clasico :D
Publicar un comentario